Y es que entre más le escarbe a mis entrañas, más pensamientos aparecen -como sucede en la tierra negra, entre más se escarbe, más gusanos y bichos aparecen-.
No es bueno estar enojada y ser rencorosa, no puedo evitarlo en estos momentos.
Sigo encabronada, porque me doy cuenta que EL quiere salir tan pronto le sea posible de esta relación, quiere que realice el trabajo sucio por él, lo quiere rápido para no sufrir. Él no quiere sufrir lo que yo sufrí, él no quiere sufrir lo que yo sufro al solicitar la carta, al tener en mis manos el acta de matrimonio, él no sufre lo que yo tengo que sufrir al tener que facilitarle las cosas y seguir viendo todo lo que me produce dolor sin desearlo, que tan sólo ver esas cosas las lágrimas salen de mi y sin pedir persmiso: EL es egoísta.
Quiere que haga todo rápido y le facilite su dolor, ¿¿y a mi??? ¡¡¡que me lleve el carajo, claro!!!
Por eso estoy encabronada, y entre más rasco, más encuentro.
Es innevitable seguir buscando.
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