Contactando al señor B

Desde el año pasado tenía la intención de llamarle a mi ex jefe CB, cuando mamáadriana me había dicho que lo habían hecho director del museo Federico Silva en SLP... y pensar que alguna vez finalizando el 2007 pasé por ese lugar... en fin.

Hoy al mediodía finalmente lo hice:

—Buenas tardes, ¿se encontrará el señor CB?

—Claro, ¿quién le busca?

—CC

—¿De dónde le llama?

—De conarte, Monterrey.

—Ah muy bien, ahorita se lo comunico...¿sobre qué asunto, disculpe?

—Personal.

Fue maravilloso, que después de tantos años, volverle a escuchar su voz. Dijo no poderlo creer quién estaba al otro lado de la línea, esa regia de quien tanto se escucha hablar... claro, su única manera de hacer sentir únicos a los demás...

Me preguntó que qué había sido de mi vida, hizo una analogía muy cómica y certera...

¿Qué pasó de tu vida? ¿Te casaste, te divorciaste?, ¿pero qué? Porque ya no supe, sentí como si me hubiera salido a mitad de la película a comprar palomitas y al regresar ya me había perdido parte de la película y ya no le entendía...

En efecto, le resumí el vaivén de las cosas, que se intentó llevar de nuevo la relación, pero que la relación ya estaba fracturada, como un jarrón cuando lo pegas no vuelve a quedar igual y respondió...

...¿pero por qué? Si aún así se puede hacer una bonita instalación, ilusoria, diferente... fíjate que hay un artista que se dedica a romper cosas para luego pegarlas y darle otra perspectiva de las cosas, una propuesta diferente...

...mi respuesta fue "en efecto, eso fue, pura ilusión, muy vuelto a pegar pero ya no funcionaba", ya ni para qué hablarle sobre lo mantenido que fue, que la mujer de la casa mantuvo su huevonería por 10 meses, que el vato ni cooperaba, que era un baquetón y que lo único que quiso fue regresar a su casita donde según él sólo allá había propuestas para su carrera, o sea jeloooouuu, estás en la ciudad industrial, ¡¿cómo diantres no vas a encontrar trabajo de tu área?! ash... B hizo que recordara pesadumbres, sólo le resumí en tres palabras, el duelo que pasé y finalmente lo enormemente feliz que me siento... me preguntó que cuántos novios he tenido desde entonces y la pena me invadió, cuando antes Celina era súper noviera ahora, gracias a quien se había dedicado a romperle el corazón, sólo ha tenido uno, él se sorprendió que cómo he estado sola tanto tiempo... ¡es vato! al final de cuentas no entienden que eso de no tener a alguien es saludable, le hice saber que para mi desgracia sólo había puro pendejo pretendiéndome y lo entendió, aseguró que había más pendejos en Guadalajara y le dije "en efecto, eso no te lo discuto".

Me costó uno y la mitad del otro hablarte de "tú", ya que siempre, hasta la última llamada de hace unos años siempre le hablé de "usted". Me sentía extraña, como si no fuera yo hablándole así... es algo que tengo que practicar y quizás con el tiempo se me quite.

Me preguntó que cuánto tiempo llevo aquí, le dije que próximamente ya serán 4 años, sí los dos sorprendidos, es el primer trabajo en el que duro tanto tiempo...

—Céline... ya hace 4 años que nos dejaste...

—Así es Beltrán, en enero, hace ya 4 años que abandoné Guadalajara.

Me dijo que viene mucho a Monterrey y que de aquí se pasa a Laredo, que sigue trabajando para Guadalajara, en fin, de aquí a allá y de allá a acá. Me dio gusto escucharlo. Intercambiamos números, dijo regresarme la llamada, se que no lo hará pronto, pero se que algún día lo hará, cuando menos me lo espere.